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Una rueda completa pasó desde ese partido a fines de octubre dónde el Barcelona ganó uno de sus juegos más importantes de la temporada. El Real Madrid salió golpeado del Camp Nou, pero a partir de allí se volvió indestructible y no dejó de sumar en un solo partido.
Aquella noche en el estadio culé, el local se expuso un duelo clave. Era el examen más exigente para un club que había cerrado por completo la etapa Guardiola y ponía a prueba a Martino, Neymar y una nueva filosofía del éxito. El 2-1 con el golazo de Alexisfue la aprobación sobresaliente de un equipo que se mantenía invicto y líder absoluto de la Liga española.
Pero cinco meses más tarde, los roles se invirtieron y mientras el barcelonismo se envuelve en polémicas sobre la continuidad de su técnico, en Madrid se respiran aires de triunfo. Se convirtieron en líderes de la liga, arrasan en la Champions League, y esperan a la final de la Copa del Rey.
Entre una realidad y otra, hay 31 partidos que hicieron crecer a Ancelotti y a su equipo. Ya no existe el 4-3-2-1 arrastrado desde los años de Mourinho y tampoco un equipodependiente de Cristiano Ronaldo.
Apareció un sólido 4-3-3 con un Gareth Bale más participativo, y un Módric irremplazableen el sistema. El argentino Di María también forzó su titularidad con buen desempeño.Cristiano, que faltó en algunos juegos, no detuvo su "temporada de oro" y el equipo blanco volvió a ser único líder español tras 63 fechas.
Agarró en soledad la cima de la tabla de posiciones en la jornada 25, algo que no lograba desde mayo de 2012, y miró desde arriba al Atlético y al Barça pelear por el segundo y tercer puesto.
Desde 2008, Real Madrid sólo ganó dos de siete clásicos en el BernabéuEn aquel 'giro victorioso' no perdió con ninguno de los 19 equipos de la Liga BBVA. Pero para cerrar el círculo que comenzó luego del golpe recibido en Cataluña, deberá jugar de nuevo ante el Barcelona, esta vez en el Bernabéu.
Desde 2008, el Real Madrid solamente ha podido ganarle al Barcelona en su estadio dos veces. Fueron siete partidos entre Liga, Copa y Champions. Pero la paridad fue, y es, blaugrana. Hay incluido un 6-2 que pasó a la historia y los merengues no logran borrar.
Ya lejos quedó esa alineación del último partido, que en el Camp Nou tuvo las improvisaciones de Sergio Ramos como mediocampista central, de Módric como volante externo, y Cristiano como delantero centro. Aquel equipo se vio encerrado en su campo, con las líneas incomunicadas entre sí y sin recursos para controlar la pelota.
El nuevo equipo sí responde. Se coloca primero con 70 puntos, cuatro arriba del club blaugrana. No será alcanzado si pierde, pero el Atlético (67) también está en la pelea y puede beneficiarse del derby.
La posibilidad de que la victoria se pinte de blanco se sustenta con la cadena de triunfos, con el escenario que montará su público y con un presente que mejoró tras tropezar en un clásico.
Este domingo, a las 20.00 GMT, la misma piedra aparece en el camino, pero hoy el imbatible Real Madrid puede desafiar al Barça.