Según el recuento que realiza la Universidad Johns Hopkins, unas 2.108 personas perdieron la vida en el país en las últimas 24 horas, con lo que el total de fallecidos allí se elevó a 18.777.
Pero no quedó ahí: el país norteamericano se acercó también al medio millón de casos confirmados de covid-19, con 496.535, un aumento de 35.098 en las últimas 24 horas.
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La propia Casa Blanca ha admitido con anterioridad que el número real de contagios en el país podría ser entre ocho y diez veces mayor.
Dada la escasez de pruebas que ha afrontado el sistema de salud estadounidense para detectar los casos positivos se cree que el número de muertos también podría ser muy superior a la cifra oficial.
Los muertos y la economía
El anuncio del aumento de las víctimas tuvo lugar horas después de que el presidente Donald Trump asegurara que la curva de infección en el país se estaba "aplanando".
El mandatario anunció, además, la creación de un nuevo un grupo de trabajo para centrarse en la reapertura de la economía estadounidense.
"Lo anunciaremos dentro de poco. Probablemente el martes", indicó el mandatario durante una sesión informativa diaria.
Según unos controvertidos cálculos iniciales de la Casa Blanca, entre 100.000 y 240.000 personas podrían morir en Estados Unidos de coronavirus.
Sin embargo, este viernes Trump indicó que la proyección se había reducido y que esperaban que fueran menos de 100.000.
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